+ ¿Sabes? Estoy hecha un lío, no sé si lo quiero o no; y si te digo la verdad, no quiero seguir haciéndome daño.
- ¿Que no sabes qué? No intentes engañarme, a mí no. Es evidente que lo quieres, y mucho. Sólo hay que verte cuando lo ves aparecer, como se te iluminan los ojos y como aparece de la nada una tremenda sonrisa. Como cuando se acerca se te acelera el corazón y no puedes pronunciar ni una sola palabra...
+ Vale, sí, puede que lo quiera... Pero , ¿y si él a mí no? No quiero pasarlo otra vez ma.
- ¿Que él no? También me fijo, como cuando te ve, hace lo posible para pasar por tu lado e intentar llamar toda tu atención; como cuando te habla te mira a los ojos y baja la mirada, como cuando habla con sus amigos se refiere a ti diciendo: “Es ella”. Creo que deberías de dejar de hacerte preguntas y empezar a encontrar respuestas. Sé que él te puede dar todo lo que tú necesitas y que tú puedes hacerlo feliz a él. Deja de pensar en el “y sí..." y actúa, no pienses en volverlo a pasar mal.